Thursday, November 17, 2005
El calor y la flaca
la noche del taxista
(viernes de madrugada)
yo soy el pasajero
el de frágil destino
la charla repetida
en otras tantas noches
igual la circunstancia:
"apenas si me alcanza para el morfi del día
si supieras qué linda es la flaca del barrio
que me tiene caliente..."
y mis ojos lo acechan
y persiguen su mano
seductora paloma que se posa en la palanca de cambios
y retorna a su muslo con las alas plegadas
y me atisba el deseo por el pequeño espejo
furtiva la mirada
de promesas repleta
la noche del taxista
es amarilla y negra
Adolfo Adaro
la noche del taxista
(viernes de madrugada)
yo soy el pasajero
el de frágil destino
la charla repetida
en otras tantas noches
igual la circunstancia:
"apenas si me alcanza para el morfi del día
si supieras qué linda es la flaca del barrio
que me tiene caliente..."
y mis ojos lo acechan
y persiguen su mano
seductora paloma que se posa en la palanca de cambios
y retorna a su muslo con las alas plegadas
y me atisba el deseo por el pequeño espejo
furtiva la mirada
de promesas repleta
la noche del taxista
es amarilla y negra
Adolfo Adaro