Sunday, June 04, 2006
Estrategia anti-gay
En año electoral todas las herramientas son válidas, especialmente las que movilizan a uno de los sectores más poderosos de Estados Unidos: el religioso. El oficialismo pretende votar este mes en el Senado una enmienda constitucional para prohibir las uniones homosexuales, todo con las elecciones legislativas de noviembre en la mente.
Una coalición de unos 50 destacados líderes religiosos, incluidos seis cardenales católicos y media docena de arzobispos, ha firmado una petición y comprometido su apoyo a favor de una enmienda constitucional para prohibir el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Los organizadores de la petición señalaron que su objetivo es revivir la oleada de opiniones contrarias al matrimonio entre personas del mismo sexo que desempeñó un importante papel al impulsar el voto conservador en las elecciones de 2004. Los republicanos están crecientemente preocupados respecto de las elecciones de noviembre y los líderes republicanos del Senado han programado un voto en junio respecto de la enmienda constitucional.
Nadie cree que sea aprobada, pero los conservadores esperan utilizar el voto para reunir a sus adherentes de base contra los liberales que se oponen a la medida argumentando que discrimina a homosexuales y lesbianas.
Los organizadores de la petición dicen que varios de los religiosos involucrados se han comprometido a distribuir tarjetas postales o cartas a sus feligreses instándolos a apoyar la enmienda.
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En año electoral todas las herramientas son válidas, especialmente las que movilizan a uno de los sectores más poderosos de Estados Unidos: el religioso. El oficialismo pretende votar este mes en el Senado una enmienda constitucional para prohibir las uniones homosexuales, todo con las elecciones legislativas de noviembre en la mente.
Una coalición de unos 50 destacados líderes religiosos, incluidos seis cardenales católicos y media docena de arzobispos, ha firmado una petición y comprometido su apoyo a favor de una enmienda constitucional para prohibir el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Los organizadores de la petición señalaron que su objetivo es revivir la oleada de opiniones contrarias al matrimonio entre personas del mismo sexo que desempeñó un importante papel al impulsar el voto conservador en las elecciones de 2004. Los republicanos están crecientemente preocupados respecto de las elecciones de noviembre y los líderes republicanos del Senado han programado un voto en junio respecto de la enmienda constitucional.
Nadie cree que sea aprobada, pero los conservadores esperan utilizar el voto para reunir a sus adherentes de base contra los liberales que se oponen a la medida argumentando que discrimina a homosexuales y lesbianas.
Los organizadores de la petición dicen que varios de los religiosos involucrados se han comprometido a distribuir tarjetas postales o cartas a sus feligreses instándolos a apoyar la enmienda.
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