Friday, December 11, 2009
Sabanagay
Once ensayos conforman el libro Sabanagay, compilado por Carlos Colina. En sus páginas, Sabana Grande figura como un espacio de libertad que, lamentablemente, ha sufrido un deterioro
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Los espacios urbanos de los homosexuales caraqueños y la manera como los gays son representados en la cultura son algunos de los temas planteados en el libro Sabanagay.
Disidencia y diversidad sexual en la ciudad. Se trata de una compilación presentada por el sociólogo Carlos Colina y editada por el sello Alfa, el Instituto de Investigaciones de la Comunicación (Ininco) y la Universidad Central de Venezuela (UCV).
La obra está conformada por once ensayos. Los primeros cuatro, escritos por Colina, Alexis Alvarado, Carlos Gutiérrez y José Benítez, abordan el tema de la conformación de espacios sexodiversos dentro de las urbes, desde las zonas rosa o zonas de tolerancia hasta los barrios gays, lésbicos, transexuales y transgéneros.
El ensayo que da título al libro es Sabanagay, escrito por Alvarado. El autor presenta al boulevard de Sabana Grande como un espacio geográfico en el cual la comunidad gay local se reconoce a sí misma, y que constituye una especie de “santuario queer (homosexual)”.
Colina también se centró en Sabana Grande para llevar a cabo una serie de entrevistas a 22 homosexuales de distintos estratos sociales y con edades comprendidas entre los 18 y los 63 años.
El resultado de su trabajo se titula Sabanagay sangrante: del alegre “tasca tour” a los crímenes de odio. “Hice un estudio etnográfico y fenomenológico. En un estudio de representaciones sociales, hay distintas formas de representarse a Sabana Grande.
Para la población adulta hay un ‘Sabanagay’ nocturno, porque era una generación del clóset. La gente tenía un estilo en el día y en la noche se abría a la vida gay. Hoy en día esa escisión se ha roto un poco. Hay un ‘Sabanagay’ diurno y nocturno”, explica el investigador.
El mismo boulevard fue objeto de estudio para Gutiérrez y Benítez, quienes efectuaron una investigación acerca de las saunas homosexuales. La mayoría de estos establecimientos están ubicados en Sabana Grande.
Para Colina, Sabana Grande es un lugar sin límites, de libertad. “A partir de los años 70 comenzaron a surgir los sitios de encuentro para nuestra comunidad en sus linderos.
Pero a contracorriente de lo que ha sucedido a nivel internacional, donde los barrios gays han sufrido un proceso de renovación urbana, aquí hemos sido víctimas de lo contrario.
Hay un proceso involutivo. Sabana Grande se ve afectada por la pérdida de los espacios públicos que afecta a todos los ciudadanos. A ello se suma que, en el caso del colectivo Glbti (que agrupa a gays, lesbianas, bisexuales, transgéneros e intersexuales) hay vulneraciones de derechos que tienen que ver con la represión militar y policial de la sexualidad. Hay extorsión, acoso y maltrato policial”.
La segunda parte del libro se centra en los espacios imaginarios y literarios. Destaca el ensayo Literatura venezolana y representación de la mujer lesbiana, escrito por la narradora Gisela Kozak. “Sí. El lesbianismo en Venezuela es un asunto de pocas páginas”, suscribe la autora. El actor y dramaturgo José Antonio Barrios se centra en la presencia y participación del colectivo Glbti en los espacios teatrales.
Elizabeth Pazos parte de una obra de la escritora neoyorquina Djuna Barnes, El bosque de la noche, y escribe –desde su perspectiva de mujer heterosexual– acerca de la manera en que Barnes asumió su orientación sexual.
La estética y la homosexualidad y una aproximación cualitativa a los modos de vida de las minorías sexuales aglutinan los últimos cuatro trabajos recogidos por Colina.
El valor de estos ensayos reside en que se trata en la primera publicación realizada en el país que se enmarca en el área de los ‘estudios queer’, una rama de los estudios culturales que aborda el imaginario homosexual a través de un enfoque multidisciplinario. Fuente: TalCualDigital
Los espacios urbanos de los homosexuales caraqueños y la manera como los gays son representados en la cultura son algunos de los temas planteados en el libro Sabanagay.
Disidencia y diversidad sexual en la ciudad. Se trata de una compilación presentada por el sociólogo Carlos Colina y editada por el sello Alfa, el Instituto de Investigaciones de la Comunicación (Ininco) y la Universidad Central de Venezuela (UCV).
La obra está conformada por once ensayos. Los primeros cuatro, escritos por Colina, Alexis Alvarado, Carlos Gutiérrez y José Benítez, abordan el tema de la conformación de espacios sexodiversos dentro de las urbes, desde las zonas rosa o zonas de tolerancia hasta los barrios gays, lésbicos, transexuales y transgéneros.
El ensayo que da título al libro es Sabanagay, escrito por Alvarado. El autor presenta al boulevard de Sabana Grande como un espacio geográfico en el cual la comunidad gay local se reconoce a sí misma, y que constituye una especie de “santuario queer (homosexual)”.
Colina también se centró en Sabana Grande para llevar a cabo una serie de entrevistas a 22 homosexuales de distintos estratos sociales y con edades comprendidas entre los 18 y los 63 años.
El resultado de su trabajo se titula Sabanagay sangrante: del alegre “tasca tour” a los crímenes de odio. “Hice un estudio etnográfico y fenomenológico. En un estudio de representaciones sociales, hay distintas formas de representarse a Sabana Grande.
Para la población adulta hay un ‘Sabanagay’ nocturno, porque era una generación del clóset. La gente tenía un estilo en el día y en la noche se abría a la vida gay. Hoy en día esa escisión se ha roto un poco. Hay un ‘Sabanagay’ diurno y nocturno”, explica el investigador.
El mismo boulevard fue objeto de estudio para Gutiérrez y Benítez, quienes efectuaron una investigación acerca de las saunas homosexuales. La mayoría de estos establecimientos están ubicados en Sabana Grande.
Para Colina, Sabana Grande es un lugar sin límites, de libertad. “A partir de los años 70 comenzaron a surgir los sitios de encuentro para nuestra comunidad en sus linderos.
Pero a contracorriente de lo que ha sucedido a nivel internacional, donde los barrios gays han sufrido un proceso de renovación urbana, aquí hemos sido víctimas de lo contrario.
Hay un proceso involutivo. Sabana Grande se ve afectada por la pérdida de los espacios públicos que afecta a todos los ciudadanos. A ello se suma que, en el caso del colectivo Glbti (que agrupa a gays, lesbianas, bisexuales, transgéneros e intersexuales) hay vulneraciones de derechos que tienen que ver con la represión militar y policial de la sexualidad. Hay extorsión, acoso y maltrato policial”.
La segunda parte del libro se centra en los espacios imaginarios y literarios. Destaca el ensayo Literatura venezolana y representación de la mujer lesbiana, escrito por la narradora Gisela Kozak. “Sí. El lesbianismo en Venezuela es un asunto de pocas páginas”, suscribe la autora. El actor y dramaturgo José Antonio Barrios se centra en la presencia y participación del colectivo Glbti en los espacios teatrales.
Elizabeth Pazos parte de una obra de la escritora neoyorquina Djuna Barnes, El bosque de la noche, y escribe –desde su perspectiva de mujer heterosexual– acerca de la manera en que Barnes asumió su orientación sexual.
La estética y la homosexualidad y una aproximación cualitativa a los modos de vida de las minorías sexuales aglutinan los últimos cuatro trabajos recogidos por Colina.
El valor de estos ensayos reside en que se trata en la primera publicación realizada en el país que se enmarca en el área de los ‘estudios queer’, una rama de los estudios culturales que aborda el imaginario homosexual a través de un enfoque multidisciplinario. Fuente: TalCualDigital
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# posted by Gertrudis @ 12:00 AM 
